El Espacio Frank Rebajes del Ateneo de Málaga presenta la exposición PINK, de la artista Evelyne Rigaud, comisariado por Manuel Callejón.
La inauguración es el viernes 19 de enero a las 19:30 horas, y se puede visitar hasta el 8 de marzo.
El puro azul ennoblece
mi corazón. Sólo tú, ámbito altísimo
inaccesible a mis labios, das paz y calma plenas
al agitado corazón con que estos años vivo.
Vicente Aleixandre
PINK
O el desafío de Evelyne
La fuerza en la obra de Evelyne Rigaud (1990, Bordeaux, Francia) radica en la manera en que desafía sus mayores pesadillas. Y lo hace confrontando emociones que, en principio, parecen discordantes. Como ella misma, sus obras se mueven entre la pasión y el equilibrio, entre lo suave y lo duro, entre lo vulnerable y lo fuerte.
Formada en Management y Marketing en Francia y Alemania, la impronta de estos estudios se aprecia en su interés por el uso de formas geométricas simples, que comunican una idea de forma fácil y directa. Pero cuando observamos sus cuadros, ese equilibrio choca frontalmente con la energía de los colores vivos y contundentes, contrapesando la sencillez que producen los primeros, con la inestabilidad de los segundos, provocando en el espectador una atención total centrada en las emociones que está sintiendo.
Sentir, emocionarse, revelarse… preguntarse cosas. Esa es la intención de Rigaud en cada uno de los proyectos que acomete, tanto para con ella misma, como para motivar con su obra al espectador. Necesita enfrentarse a sus demonios a la par que denuncia las desigualdades de una sociedad que no comprende y un sistema de normas al que se enfrenta desde niña.
Por ello PINK es un desafío con el que se ha retado a si misma, pintado hasta la saciedad con un color que detesta por su significado, por todo lo que representa: desigualdad, estereotipos, un mundo separado en dos (rosa para las niñas, azul para los niños), el color de las niñas, de las princesas.
A su vez, reta al público. Al estar en una sala rodeado/a de rosa por todas partes, éste deberá enfrenarse a los significados que representa ese color, a descubrir su propia mochila personal que arrastra desde niño/a y a las diferencias sociales que le trasmite.
Y todo ese mundo color rosa se nos representa encerrado en cuadrados. Esta forma geométrica simple tiene un significado especial para nuestra artista. El cuadrado le da tranquilidad y le trasmite equilibrio… como a todo el mundo. Pero para ella, además, le produce al mismo tiempo un gran desasosiego, pues le recuerda a las cajas con etiquetas en las que nos encierran la sociedad y sus prejuicios.
De nuevo encontramos la contraposición, la lucha entre extremos de una fina cuerda floja. Evelyne Rigaud explora los límites emocionales como un equilibrista, con la misma energía que usa para explorar sus límites físicos y mentales en sus performances, que por cierto, también podremos ver en la exposición gracias al audiovisual.
Diversas son las influencias de las que bebe esta artista multidisciplinar para llevar a cabo sus trabajos: corrientes artísticas, estilos musicales, teatro, arquitectura y cientos de cosas que ha experimentado en sus viajes por el mundo. Pero sin duda, para el proyecto que nos presenta en el Espacio Frank Rebajes del Ateneo de Málaga, comisariado por Manuel Callejón, su mayor influencia ha sido Malévich y la corriente Suprematista que él mismo creó. Podemos comprobar esta influencia, no solo en el uso de la abstracción geométrica, con la predominancia del cuadrado y las formas simples, sino también (y sobretodo) en la persistencia en transgredir las convenciones sociales y revelarse contra lo establecido, en su uso del arte como medio de expresión para hacer reflexionar a la gente y provocar inquietudes y críticas.
En definitiva, ¿tú también te has preguntado alguna vez por qué odias el rosa?
Victoria Abón
Sobre Evelyne Rigaud
Comenzó su carrera artística en tiempos de post-pandemia cuando siente que necesita replantearse la manera en que se expresa con el medio y conecta con las personas. Trotamundos, asertiva y ecléctica, Evelyne vive el arte como una forma de conocimiento cultural y de nexo humano mediante la teatralidad performántica o la improvisación sobre el lienzo. La historia, los idiomas y las relaciones personales subyacen bajo su visión artística caleidoscópica, política y antropológica, donde las conexiones humanas -y los distintos medios para apelar a ellas- verbalizan y nutren su puesta en escena geométrica, de formas simples y colores vivos enfocada hacia los diseños poderosos y eficientes.
De naturaleza inquieta y espontánea, Evelyne Rigaud bebe de la pintura, del teatro y hasta el malabarismo, mantiene desde sus primeros años una relación contemplativa y de admiración hacia el arte en sus múltiples expresiones, y en lugares tan equidistantes como Alemania, Australia, Nueva Zelanda, Tailandia, Francia y España.
El trato continuo con el público, y el deseo de dialogar, darse a entender y de guiarse a través del lenguaje y las costumbres locales deviene en la transición artística de Evelyne Rigaud, desde un rol como espectadora pasiva hacia una creadora artística transhumante multifacética que se atreve con la ilustración, el collage y los acrílicos, el arte de la puesta en escena y las performances, los murales, el spray y los graffitis.
– Jesús Reina Estévez