Secall ha sabido extraer de las diferentes técnicas del grabado lo mejor de cada una de ellas para conseguir su objetivo: ofrecer una nueva iconografía sobre la temática mitológica.
«Mitología, es un término que tiene su origen en el idioma griego, que derivó en el término latino mythología. En sentido general puede definirse como un conjunto de mitos relativamente cohesionados, relatos que forman parte de una determinada religión o cultura. En esta ocasión Carlos Esteve SECALL ha reinterpretado la iconografía referente a veinte mitos de la mitología clásica haciendo uso de su pericia en materias como el dibujo, la perspectiva y la composición que le vienen dadas por su larga experiencia como arquitecto y profesor de expresión gráfica, todo ello impregnado de un claro sentido lúdico y hermético que, junto a minuciosos enfoque de volumetría y perspectiva, hacen de cada una de estas estampas calcográficas un auténtico hito en la representación de esta temática recurrente en la historia del arte.
Afirma Francisco José Palomo Díaz que “El grabado sigue siendo un arte en el que es bueno mantener la vitola de hermetismo que lo hace tan elevado y noble sobre las restantes artes gráficas”. Este sentido hermético se ve reflejado en toda la serie, pero fundamentalmente, en los grabados El rapto de Europa y Leda. Sin embargo, una de las claves más interesantes para entender la obra de SECALL es el sentido lúdico con que impregna la narratio de alguna de sus obras, restando dramatismo a las escenas. Tal es el caso de Artemisa y Acteón, Hércules en el lago Esfíntalo, en la que las aves que atacan a Hércules son sustituidas intencionadamente por pajaritas de papel o Edipo y la Esfinge en el que el “enigma” aparece simbolizado por el cubo de Rubik, las puertas de la ciudad de Tebas se han convertido en un juguete infantil de pequeños bloques de madera que aparece sobre un suelo ajedrezado tras los personajes y la esfinge se ha representado como un triciclo de madera. Pero donde el artista hace gala de una mayor teatralidad es, sin duda, en El juicio de Paris cuyos personajes, colocados en un escenario con una exhaustiva composición, son tratados con la misma intensidad que cada uno de los elementos y donde nada aparece por azar. La visión cosmogónica y rotunda de la representación de Crono, nos hacen ver los múltiples contrastes de un artista inquieto que explora continuamente nuevas resoluciones representativas.
En definitiva, nos encontramos ante una serie de grabados de una calidad impecable que refleja la personalidad polimórfica de su autor. Carlos Esteve SECALL ha desarrollado, durante 40 años su profesión de arquitecto, que ha compaginado con su labor docente en la Universidad de Granada de las asignaturas de Geometría Descriptiva y de Expresión Gráfica Arquitectónica. Es, además, experto en Gnomónica, ciencia que estudia la proyección de relojes de sol y ha diseñado varios cuadrantes solares para entidades privadas y públicas, entre los que sobresalen los relojes de sol de los paseos marítimos de Algarrobo y Torrox en Málaga y el situado en los exteriores de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Granada. Es diseñador gráfico, pintor acuarelista, dibujante, ilustrador y grabador. Su pasión por la fotografía le ha hecho merecedor de varios premios. Pertenece al colectivo de Urban Sketchers Málaga (USK) y se inició en el grabado en Málaga en el año 2014 con el maestro grabador Francisco Aguilar. Actualmente es miembro del Colectivo de Grabadores Fuengirola ubicado en el Taller Municipal de Grabado de Fuengirola (Málaga) y dirigido desde su fundación en el año 1985 por el pintor y maestro grabador José María Córdoba. Recientemente, ha obtenido un Accésit en la modalidad de grabado en los “Premios Ateneo- Universidad de Málaga 2018” por su obra Edipo y la esfinge y el Primer premio en la modalidad de grabado en los “Premios Ateneo-Universidad de Málaga 2019” por su obra Zenobia.
En 20MITOS20, SECALL ha sabido extraer de las diferentes técnicas del grabado lo mejor de cada una de ellas para conseguir su objetivo: ofrecer una nueva iconografía sobre la temática mitológica, a través de un minucioso trabajo, pleno de pericia en el dibujo y la perspectiva, que la actualiza y retrotrae en el tiempo con una atrevida puesta en escena no exenta del rigor narrativo que la temática elegida demanda».
Inmaculada García Haro
