Las caras del tiempo

«La fotografía siempre mira a la cara del tiempo y a su perfil. De hecho busca su mirada y la retrata, sabiendo que desde ella el fotógrafo y nosotros, sus espectadores, nos asomamos a la naturaleza secreta de quiénes al ser enfocados se convierten en personajes de aquel que les dispara.

Una poética y un oficio el de la mirada que nos propone una escena, un poema, un significado visual o un relato en el que se ha curtido Ricardo Martin paciente y habilidosos en calibrar el gesto, la sombra, el carácter, el detalle, el alma de escritores, de actrices, de políticos, de pensadores, de artistas, nombres de una época en la que la fotografía era también su música en blanco y negro. Rafael Alberti, La Pasionaria, Juan Marsé, Antonio López, José Luis Aranguren, Victoria Abril, Muñoz Molina, Estrella Morente en primer plano, en plano americano, en fuga resistiéndose o en serena composición en el instante en el que sus ojos y los de Ricardo Martin se encuentran en la mirada fotográfica que los piensa, que los suspende un instante ingrávidos en el tiempo, y entonces el retrato sucede. Nunca los mira igual. A cada uno le toma la distancia que requiere, le busca o le crea el puente en el que ambos se encuentren en el momento idóneo de la precisión del disparo.

En la mayoría de las fotografías de Las caras del tiempo se puede ver en los ojos del retratado, si el espectador se acerca lo suficiente, la pupila que en ese justo momento los estaba respirando. A Ricardo Martin haciendo del retrato un arte, un cuaderno de bitácora de un país a través de sus personajes y a la vez su propia autobiografía de fotógrafo.

Unas huellas en cuya exposición mirar también nuestro reflejo y la cultura de la que somos, quizás sin saberlo, una imagen en movimiento a la que Ricardo Martin sin que nos demos cuenta le está intuyendo su retrato».

Guillermo Busutil