Para superar el terror a las cucarachas
Por CHRISTINE FÉLIX
Si vas a entrar en la casa de un muerto, protégete de la negrura y de las cucarachas acechando en la oscuridad. Si vas a abrir la puerta de los recuerdos, protégete, no vaya a ser que acabes amando las cucarachas, su exoesqueleto aerodinámico, el brillo de la resistencia hecho negrura, su velocidad.
Primero, abre la puerta de los miedos, entra a tientas palpando las paredes que te llevan al terror e imagina un escenario de muerte. Un cuerpo en el suelo y el río de cucarachas recorriendo caminos, hileras de antenas que buscan también palpar en la búsqueda de las humedades, la podredumbre, la destrucción.
Presta atención y agudiza los sentidos, guíate por el oído y escucha la gota cayendo en el sumidero, son intervalos de agua resbalando como el tiempo para quien ya se haya ido también hacia la oscuridad.
Entra despacio en ese mundo certero, el de la vida, el de tu corazón latiendo alocado y, sobre todo, no las vayas a pisar.
Cierra el grifo con precaución, ya estás viendo como corren trepidantes, buscando sombras para sortear la muerte. Corren como tú, tratando de encontrar una salida rápida a la angustia de otros miedos.
Recuérdalo, no son ellas las que te persiguen.
Por último, compadécete. Ellas siempre son las últimas en tocar lo que da asco, también fueron las últimas en recorrer un cuerpo amado pero ya frío y abandonado. Son ellas las que como una turba nocturna tejen un manto para arrullarlo en el frío de la noche, cuando tú te has ido.
Instrucciones solicitadas por Toñi S. “para superar la fobia a las cucharachas”.
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A los problemas, PUNTO HUM.
Vocalía de Acción Literaria del Ateneo de Málaga
Seguiré sin superar mi fobia, pero me ha gustado mucho la narración